PASO 3º:

 Condimentamos el guiso con  una cucharada de curry (al gusto) (foto 2ª) y  unas 6 cucharadas de leche de coco (foto 3ª), que le aportarán cremosidad. Dejamos que cueza todo unos 8 minutos a fuego suave, para que se unifiquen los sabores. Nos tiene que quedar una textura cremosa como la de un risotto. Si vemos que se nos queda muy seco, añadimos un poco más de caldo.  Ponemos a punto de sazonamiento.
 Las lentejas combinan muy bien con el curry, pero al principio hay que ponerle poca cantidad, hasta que se adapte a nuestro gusto.

PASO 4º:

 Por otra parte, en un bol, echamos la harina de tempura, añadimos poco a poco agua fría removiendo con una varilla hasta conseguir una textura que nape bien. Ponemos un cazo al fuego con abundante aceite.
 Pasamos las patitas de calamar sazonadas, primero por harina, sacumidos el exceso y después por la tempura (foto 4ª). Las freímos, hasta que se doren.
 Retiramos a un plato con papel absorbente.
 Para emplatar, disponemos en un plato sopero las lentejas calientes y colocamos encima un montoncito de las patas rebozadas (foto 5ª).
 NOTA: un plato de lentejas distinto, con toques asiáticos: indios y tailandeses. Es un plato que resulta fácil de comer, y con un sabor más suave de lo que pueda parecer. Y con un detalle muy nuestro, calamar rebozado.